¿Estás cansada de ver que tu hijo se resiste a trabajar en sus actividades escolares? ¿Lo notas aburrido, desmotivado o incluso evasivo?
Si bien las clases escolares en línea han apoyado en estos momentos de pandemia para continuar trabajando los aprendizajes académicos de los niños, el acompañamiento emocional del día a día es la energía que potencializa ese aprendizaje para que éste se vuelva significativo.
¡Aquí tres súper claves para accionarlo!:
1.- PACIENCIA: Antes de explotar y sobre exigir ante la situación que observas, respira y piensa antes de gritarle, recuerda que la base del aprendizaje es un ambiente emocional equilibrado y congruente. Nadie trabaja al cien bajo presión.
2: JUEGO: ¡Que las actividades se vuelvan creativas!, si observas que no lo son del todo por parte del docente, tú puedes hacerlas divertidas para tu hijo, retoma el tema a manera de juego, como tipo Lotería, juego de palabras, o hasta incluso, inventar una canción con la temática.
3.-EMPATÍA: Si algo no entiende tu hijo de la clase, invítalo a preguntar sus dudas, ya sea en clase o en chat, o acompáñalo a investigar en diferentes medios y buscar la solución a lo que le preocupa, aburre o simplemente evade, seguramente al tenerlo más claro, las resistencias irán disminuyendo. Si se sabe comprendido en su situación, sentirá menos presión para preguntar lo que desconoce, participar por el simple hecho de hacerlo, o simplemente expresar lo que siente.
Seguiremos publicando más estrategias, mientras tanto, ¡que otras estrategias emocionales aplicas en casa? Compártelas con nosotros en nuestras redes sociales.
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Mtra. Gabriela Álvarez Aguilar
Psicóloga y Pedagoga
Máster en Intervención en dificultades del Aprendizaje.
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